Ambos presidentes acuerdan una investigación internacional tras el incidente del avión Embraer 190 presuntamente derribado por un misil ruso.
El presidente ruso, Vladimir Putin, expresó sus condolencias a su homólogo azerbaiyano, Ilham Aliyev, tras el accidente de un vuelo comercial supuestamente derribado por un misil, calificando el hecho como un «accidente trágico».
Sin embargo, no confirmó si el sistema antiaéreo ruso estuvo involucrado, a pesar de que este se encontraba activo en la región debido a ataques con drones registrados el mismo día.
Un avión Embraer 190 de Azerbaijan Airlines, que viajaba de Bakú a Grozni, sufrió un accidente que resultó en la muerte de 38 personas. El aparato se desvió de su ruta habitual y se estrelló cerca de Aktau, en el oeste de Kazajistán posiblemente impactado por un misil ruso.
Aliyev señaló que las pruebas iniciales, como daños en el fuselaje y testimonios de testigos, sugieren una «interferencia física externa».
A pesar de ello, evitó atribuir responsabilidades directas. Ambas partes acordaron colaborar en una investigación liderada por una comisión kazaja que incluirá especialistas de Rusia, Azerbaiyán y Brasil.
El Kremlin informó que el accidente ocurrió mientras el avión intentaba aterrizar en Grozni, una ciudad ubicada en una zona con actividad militar activa.
Según Putin, se busca garantizar una investigación «transparente y objetiva» que permita esclarecer los hechos.
Aunque no se han señalado culpables de manera oficial, los resultados de la investigación podrían tener implicaciones en las relaciones bilaterales entre los países involucrados.
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