Integrantes de la Unión de Indígenas Radicados en Acapulco (UIRA) de manifiestan en el Palacio Municipal para exigir al gobierno que les permitan vender en la avenida Costera, porque desde enero de este año las autoridades no les quieren renovar los permisos a más de 200 artesanos que están distribuidos en diferentes zonas.
Unos 50 indígenas empezaron a llegar desde las 8 de la mañana, piden “respeto a sus lugares de trabajo” y que se cambie al director de Vía Pública, Raúl Ceballos Carbajal, porque señalan que discrimina y humilla a este sector de la población.
El dirigente de la UIRA, Marco Guevara Saavedra, declaró que, si la presidenta Abelina López Rodríguez sí quiere ordenar la Costera, que limpie tanta basura que hay en las calles, que repare las luminarias y que se atienda el problema del desabasto de agua en las colonias.
Después llegaron integrantes de la Coordinadora de Comisarios Ejidales y Comunales de Guerrero que durante unos 10 minutos tomaron la entrada principal del Palacio Municipal para exigir que se les entregue el fertilizante para el campo y se quitaron cuando llegó la diputada federal Rosario Merlín García, para entrar a una mesa de trabajo.
En su mensaje, la diputada federal de Morena dijo que no están de acuerdo en que se mande a buró de crédito a los ciudadanos que no han pagado a CAPAMA porque no tienen agua.
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